12 de Mayo / Día de la Madre

La Virgen María sintetiza en sus actitudes y acciones todo lo que una madre debería ser. Su bondad, abnegación, cercanía, ternura, entereza, aceptación de las dificultades y el amor por la vida y la familia son algunas de las características de esta Mujer sin fronteras a la que los niños suelen llamar: “mamá del cielo”.
Cuando pienso en María recuerdo aquellos textos del Evangelio en los que el Ángel Gabriel le dice a ella que tiene en su vientre al Hijo de Dios y esta maravillosa mujer acepta el desafío respondiendo: “Que se haga la voluntad del Señor”. Después de esta noticia no se sienta a esperar los nueve meses sino que se dispone, con sus preocupaciones a cuestas, a visitar a su prima Isabel, de la que el Ángel le informara que estaba embarazada a pesar de su vejez. ¡Cómo es posible tanta belleza de corazón!
Se trata de una madre que siempre estuvo al lado de su Hijo y que lo acompañó en las buenas y en las malas, sufriendo mucho por todas las peripecias que vivieron pero a su vez amándolo incondicionalmente hasta el final. Aunque no siempre entendía sus expresiones y acciones lo respetaba y creía en Él; “guardaba en sus corazón” todas aquellas situaciones que vivía junto a José y Jesús. Tamaña responsabilidad les dio Dios al concederles criar a su Hijo bajo el humilde techo de Nazaret. Y fue el propio Jesús quien vino a buscarla cuando llegó su hora para que estuviera eternamente junto a Él.
Quien confía en María, en cualquiera de sus advocaciones, se siente protegido y bajo su manto nada malo puede sucederle. Ella, al igual que Jesús, nos acompaña siempre: llora con nosotros en las adversidades y sonríe cuando estamos felices. Nos pide que, como ella, podamos decirle sí al Señor y confiemos en su misericordia.
A todas las madres les deseamos desde nuestra familia Sa-Fa un Feliz Día este próximo domingo 12 de mayo y siempre. Que, como María, seamos agradecidas por el don de la maternidad y podamos vivirla con alegría, disfrutando cada paso dado con asertividad y pidiendo perdón por las equivocaciones. El AMOR siempre podrá más.
Texto: Claudia Presno